Cultura y Sociedad

El arquitecto Sergio Valadez transforma una residencia de Fundación Asprodisis en un conjunto de viviendas para personas con discapacidad intelectual

Fundación Asprodisis trabaja desde hace años con un modelo centrado en la persona que deja atrás el modelo asistencial, dando respuesta así a las necesidades y demandas individuales.

El arquitecto Sergio Valadez está llevando a cabo el proyecto de transformación de la residencia de adultos de Fundación Asprodisis en un conjunto de viviendas en el que van a vivir 36 personas con discapacidad intelectual.

Fundación Asprodisis trabaja desde hace años con un modelo centrado en la persona que deja atrás el modelo asistencial, dando respuesta así a las necesidades y demandas individuales. Por ello, este proyecto supone un paso muy importante en esta transformación.

Sergio Valadez ha destacado que “el proyecto subyace de la necesidad humana de sentir un espacio como propio. Parámetros como la privacidad o la sensación de recogimiento y protección o de intimidad son muy importantes a la hora de decir que un espacio es tu casa”.

Asimismo, ha explicado que cuando inició este trabajo “lo primero que vi fue una residencia clásica, donde todo está compartido, lo que no quiere decir que esté mal ni que no funcione. Pero quizá está pensado desde el punto de vista funcional y no de cómo se vive el espacio”.

El proyecto de fraccionamiento de la residencia dará como resultado viviendas compartidas en las que cada persona tendrá su propia habitación y espacios más íntimos, además se mantendrán zonas de convivencia.

En este sentido, el arquitecto ha manifestado que “planteamos unas calles internas para que esta apertura fuera una realidad física y que además cambiara la manera de vivir, porque al final cuando haces arquitectura lo que haces es diseñar formas de vida”.

En la misma línea, ha apuntado que “hemos diseñado las habitaciones de manera que cada persona pueda disponer cómo quiere colocar el mobiliario o cómo quiere decorarlo, puesto que ese vínculo con el espacio es importante y se consigue cuando la persona puede aportar su impronta”.

Finalmente, el arquitecto ha hecho hincapié en que “este planteamiento es innovador. Me parece una aventura muy atractiva, vamos a hacer una cosa nueva y a romper un esquema”.

Las obras aún no tienen fecha prevista de inicio, puesto que el proyecto tendrá que pasar aún por varios procedimientos administrativos y tendrán una inversión aproximada de 2,2 millones de euros.

 

 


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