Cultura y Sociedad

La Hermandad de La Columna llena de ‘Esperanza’ las calles de Ronda como colofón a su 75 aniversario

Miles de rondeños y visitantes acompañaron a ‘La ‘Novia de la ciudad en una tarde calurosa y llena de sentimientos y oraciones

El trono de horquilleros de la Virgen de la Esperanza a su paso por la calle Virgen de la Paz, en su procesión extraordinaria.

La Hermandad de la Columna llenó en la tarde y noche de este pasado sábado las calles de Ronda de ‘Esperanza’ con la procesión extraordinaria que organizó para poner fin a los actos que se han venido celebrando con motivo de su 75 aniversario.

A las 19,00 horas se inició el cortejo desde la calle Ermita, donde se inició el devoto y colorido desfile, en el que participaron autoridades civiles y militares, con la alcaldesa, Maripaz Fernández, a la cabeza, y los hermanos mayores de las distintas hermandades de Pasión y de Gloria de la ciudad, que de esta forma se quisieron sumar a esta conmemoración histórica de la Columna.

Igualmente el la comitiva participaron cerca de cien mujeres vestidas de mantilla (algunas de verde, como La Esperanza), hermanos con velas y se contó con el acompañamiento musical de la Banda de Música de La Paz, una de las más valoradas de la capital malagueña, que marcaron el paso de los hermanos horquilleros en una tarde muy calurosa, en la que se tuvo que realizar un esfuerzo extraordinario para llevar el trono de palio.

Momentos emotivos se vivieron durante el desfile, como cuando se giró a la Esperanza hacia el Puente Nuevo, o cuando pasó por el manto floral situado en el pórtico de la parroquia de San Cristóbal.

Igualmente en la calle Molino, el que fuese durante muchos años párroco de la barriada de San Cristóbal, Alonso Ros Carrasco, se sumó a la procesión, siendo arropado por la Junta de Gobierno de la Columna.

Pero sin lugar a dudas los instantes más intensos se vivieron a la llegada, ya bien entrada la madrugada, de la imagen de La Esperanza a su barriada, conde fue recibida por cientos de vecinos que la esperaban con gran regocijo.


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