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Detectar un trastorno de la salud mental a tiempo es vital para evitar males mayores

Se debe acabar con el estigma de que ir al psiquiatra es solo para aquellas personas que están “al borde de la locura”, ya que este profesional atiende no solo enfermedades mentales graves, sino también problemas emocionales leves, pero que desmejoran la calidad de vida.

Hay quienes con tan solo escuchar la palabra “psiquiatra” se asustan, sin pensar en que posiblemente estén necesitando uno para mejorar su calidad de vida. La idea errónea de que ir al psiquiatra es sinónimo de un problema mental grave es un estigma que se deriva del desconocimiento absoluto de lo que hace este profesional.

Muchas personas se niegan a acudir a este especialista aún cuando han detectado dificultades internas que suponen pueden manejar por cuenta propia, lo cual no solo es un error, sino que es un riesgo porque la salud mental es algo muy delicado. 

Detectar un trastorno a tiempo es muy importante para evitar males mayores. Y es que es más común de lo que se piensa el hecho de que las personas experimentan  emociones que son difíciles de controlar, llegando a afectar las relaciones sociales. No precisamente hay que estar “a un paso de la locura” para acudir a un psiquiatra.

Lo importante es acudir con un profesional altamente capacitado, con experiencia y especializado en el ámbito de la salud mental a tratar. Un psiquiatra en Málaga que se ha convertido en referencia en el país es el doctor Carlos Sánchez Menéndez, quien se licenció en medicina en su ciudad natal Córdoba, para luego especializarse en psiquiatría del Departamento de Psiquiatría y Psicología Clínica del Hospital Clínica Universidad de Navarra, Pamplona.

Además de haberse especializado en psiquiatría general, lo que abarca a personas con esquizofrenia, trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno bipolar, depresión, ansiedad, fobias, estrés postraumático, retraso mental y más, también se formó para atender a pacientes en neuropsiquiatría, lo que se refiere a alteraciones conductuales originadas por enfermedades neurológicas.

También atiende a pacientes con diversas adicciones: cannabis, alcohol, cocaína, tabaco, entre otras, además de a niños y jóvenes con control de los impulsos, déficit de atención, depresión y ansiedad, hiperactividad, conducta alimentaria, trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno generalizado del desarrollo, entre otros.

En la consulta psiquiatra, Carlos Sánchez Menéndez atiende casos relacionados con la amplia diversidad de trastornos mentales que existen, desde las enfermedades más graves hasta situaciones de la vida cotidiana del tipo emocional o conductual que son leves pero que desmejoran la calidad de vida de los pacientes.

¿Cuándo acudir a un psiquiatra?

Dependiendo de los síntomas que la persona presente en lo que respecta a su salud mental, por lo general la primera decisión que se toma es ir al psicólogo, esto en los casos en que se considere que el asunto es leve o del tipo conductual.

En terapia psicológica el profesional considerará si el origen del trastorno que la persona presenta es físico, por lo cual lo referirá al psiquiatra, quien es el que puede dar al paciente las indicaciones para su medicación. 

El psiquiatra se dedica a prevenir, diagnosticar y tratar problemas relacionados con la salud mental, lo que incluye trastornos emocionales y psíquicos, tales como un problema familiar, duelo o una depresión profunda, lo cual incide en el desempeño laboral, las relaciones sociales y produce altos niveles de angustia.

Hay muchos síntomas más que indican que se debe consultar con un psiquiatra. Estos son: crisis de pánico, pensamientos suicidas, alucinaciones, oír voces, depresión, ansiedad inadaptativa y más signos que afectan la funcionalidad y el rendimiento de la persona en su cotidianidad.

Otros factores que pueden indicar la existencia de un trastorno relacionado con la salud mental son: ausencia o exceso de sueño, adelgazamiento repentino, ingesta de comida excesiva, problemas de memoria y dificultad extrema para concentrarse.

También los cambios en el estado de ánimo se deben revisar, así como preocupación anormal y desenfrenada, ira incontrolable y exagerada con familiares, pareja, amigos o extraños, tener pensamiento enlentecido o acelerado, miedo excesivo, pensamientos paranoides permanentes u obsesiones intensas que no pueden ser manejadas con psicoterapias.


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