La actualidad política en Cortes de la Frontera no deja de dar giros. El último de ellos ha sido la decisión del Partido Andalucista de comunicar la expulsión de su alcalde, Antonio Granero, como integrante de esta formación política. La resolución definitiva fue enviada ayer vía correo certificado a la secretaria del Consistorio, al objeto de que la comunicación se haga de forma oficial. A partir de ese momento las dudas abiertas son muchas, en especial, el destino que tomarán el resto de ediles andalucistas que todavía siguen en el equipo de gobierno, que deberán decidir si continúan apoyando al primer edil o se decantan por asumir la órdenes de su partido y dejar de respaldarlo.
Con semejante situación de incertidumbre, el futuro político de este municipio de la Serranía de Ronda está más en aire que nunca. Eso sí, los rumores sobre una posible moción de censura son cada vez más importantes, aunque las dificultades para conformar la mayoría necesaria parecen estar retrasando esa decisión.
Mientras tanto, fuentes próximas a los partidos implicados aseguran que ya existen ofrecimientos por parte de los dirigentes del PSOE a los responsables del PA para tratar de formar esa mayoría, aunque todo dependerá de la decisión del resto de concejales andalucistas. De momento, únicamente Antonio Guerrero ha dejado de respaldar al alcalde, dejando la curiosa imagen de tener ediles en el gobierno y la oposición. De hecho, el portavoz oficial es el propio Guerrero, que mantiene un abierto enfrentamiento con el primer edil.
No obstante, todo hace indicar que con el paso del tiempo la moción de censura llegará. A pesar de ello, las reticencias también se sitúan en las filas socialistas del municipio, que consideran muy complicado el poner un buen rumbo en la gestión municipal tras el tiempo transcurrido, al tiempo que insisten en recordar la decisión de los vecinos para que pasasen a la oposición. “Si hubiesen querido que nosotros gobernáramos nos habrían dado mayoría”, dicen las fuentes socialistas consultadas. Mientras tanto, la dirección provincial del PSOE sería mucho más partidaria de intentar un acuerdo de gobierno a tres bandas, con ediles del PA e IU, aunque los concejales de la formación de izquierdas se encuentran en una situación parecida al primer edil, con un expediente de expulsión abierto por parte de la dirección provincial.
