Antonio Pacheco e Ingeborg Stoop son los propietarios de La Tienda, un singular establecimiento situado en la calle de entrada a Jubrique que, en su limitado espacio, ofrece a sus clientes infinidad de productos de todo tipo.
Además de la amplia variedad de artículos y comestibles que pueden encontrarse en cualquier establecimiento, en La Tienda sus propietarios venden productos artesanales típicos de Jubrique y el entorno, tales como chacinas, miel, cerezas, castañas al brandy, licor de castañas, nueces, almendras… En el comercio también pueden encontrarse frutas y verduras, juguetes y multitud de productos de ferretería, droguería e incluso decoración. Según Ingeborg “tenemos un poco de todo para que los vecinos del pueblo se puedan apañar y no tengan que salir de Jubrique para hacer sus compras; es como un pequeño Corte Inglés en medio de la Serranía”.
Antonio, jubriqueño de nacimiento y su esposa, de origen belga, se conocieron en este pueblo serrano, curiosamente en el mismo local donde ahora se ubica La Tienda, que antes era una discoteca, durante unas vacaciones que Ingeborg pasó en el municipio. Hace 14 años ella decidió instalarse en Jubrique y abrir el comercio mientras que él trabajaba en Madrid y se desplazaba todos los fines de semana hasta su pueblo. En varias ocasiones se plantearon trasladarse a vivir a la capital, pero finalmente decidieron que Antonio dejase su trabajo para regresar a Jubrique y regentar el negocio junto a su esposa. La pareja ha manifestado que tomaron la decisión correcta, ya que “en Jubrique hay una mejor calidad de vida, vivimos en un ambiente tranquilo y rodeados de naturaleza, este es un lugar ideal donde criar a los hijos”.
Tanto Antonio como Ingeborg han explicado que mantener el comercio requiere mucho esfuerzo e incontables horas de trabajo, aunque la satisfacción de vivir en el pueblo junto a sus hijos y nietos supera con creces a cualquier sacrificio.
Muchos de los clientes de La Tienda son personas que van de paso por el pueblo y, los fines de semana, visitantes que acuden para hacer turismo rural, aunque los propietarios han manifestado que llevan tantos años con el negocio abierto gracias a la fidelidad de los vecinos de Jubrique, que acuden a diario al establecimiento.
Por tanto, Antonio e Ingeborg han querido agradecer a sus clientes la confianza que han depositado en La Tienda y han animado a todo aquel que no conozca la zona a visitar Jubrique, un municipio enclavado en un entorno natural único.
