Opinión

Esto sigue sin ser serio (Rafael Muñoz)

Lo decía en este mismo medio: “Esto no es serio”. Fue en un artículo con este título en el número de La Voz de Ronda correspondiente al día 30 de mayo del pasado año 2015, a raíz de las elecciones municipales de 24 de mayo, y la consiguiente formación de los gobiernos municipales en general y del de Ronda en particular, cuando aun no se había constituido el parlamento andaluz, con los escaños surgidos de las urnas en los comicios del 22 de marzo anterior, esperando ver qué pasaba en las locales para así poder repartirse “los cromos” de una mejor manera: “Yo te doy tales ayuntamientos si tú me apoyas en la investidura de gobierno de Andalucía, etc. etc.”.

Así ocurrió de todo: Hubo ayuntamientos constituidos por grupos minoritarios, dejando a un lado la lista más botada; en otros, que claramente podía haberse formado una coalición de izquierdas, se dejó gobernar a la lista más botada (del PP), con la inexplicable abstención de IU, mientras que en las autonómicas, que estaba cantada una asociación PSOE-Podemos, finalmente fue investida Susana Díaz, con la abstención de Ciudadanos.

¿Y ahora qué? ¿Qué pasará a nivel nacional después de las elecciones generales del pasado 20 de diciembre?
Pues la verdad es que sigue estando tan poco claro, como lo estaba hace ya más de un mes, justo después de celebrarse las votaciones. Y es que, como se veía venir, ninguno de los líderes de los partidos minoritarios quieren ceder en sus pretensiones de alcanzar el poder. Ese poder, a veces más personal que de partido, y por supuesto más que por el interés nacional, por el cual, como he comentado en algún artículo anterior, son capaces de vender su alma al diablo.

Mientras los primeros “piden tiempo”; los segundos no se aclaran entre ellos mismos; los terceros aprovechan la situación y les falta tiempo para “repartirse” de forma “virtual” cargos y ministerios (incluso crean el de Plurinacionalidad), humillando descaradamente a diestro y siniestro (nunca mejor dicho). ¿Estos son los que se suponía que anteponían los intereses de los ciudadanos (con minúscula) a los cargos y sillones? Pues ya vemos que no. ¿Y los cuartos? Estos sí son Ciudadanos con mayúscula, y parecen ser los más prudentes (siempre bajo mi punto de vista, claro), dada también la posición más modesta en la que se encuentran, pero que dicen apoyarían tanto a un gobierno de derechas como de izquierdas, del que no formarían parte, siempre que respeten las reglas de juego que se suponen constitucionales. Finalmente existen otros grupos o grupúsculos minoritarios que también estarían dispuestos a “arrimar el ascua a su sardina”, y recoger alguna que otra migaja.

Algo que no se puede tolerar ni remotamente es la idea de algunos de oficializar siquiera la más mínima posibilidad de autodeterminación de alguna región o comunidad. ¿A estas alturas vamos a poner en tela de juicio la territorialidad de España?

¿Es justo que los destinos de nuestro país y sus ciudadanos estén en las manos de de tres o cuatro personas (y sus acólitos de turno)? Hora es ya de que haya un consenso fuerte, leal y justo por España, como lo hubo en la transición de los años 70, que dieron ejemplo al mundo, y que ahora tienen también la oportunidad de emular.

La papeleta la tiene también el Rey pues, aunque se supone que debe mantener una posición lo más imparcial posible, no creamos que en las dos horas aproximadamente de entrevista que mantiene con cada líder, se va a limitar a oírles y darles una palmadita en la espalda por lo “bien” que lo están haciendo. Supongo que ahí se hablarán de temas muy profundos.

No sé si para cuando se publique este artículo habrá cambiado mucho, poco o nada la situación, pero termino con una frase que bien puede ser aplicada en cualquier tiempo, estado o lugar y que deberían apuntársela algunos: “No es lo mismo un cargo público que una carga pública”


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te pedimos la "MÁXIMA" corrección y respeto en tus opiniones para con los demás

*